Las caries en niños, también conocidas como caries de la infancia temprana, son áreas dañadas en los dientes que se producen como resultado de la descomposición de los tejidos duros del diente. Este problema es común en los niños menores a seis años y puede afectar a los dientes temporales, también llamados de leche y permanentes.
Detectar si un niño tiene caries dental puede requerir observación y, en algunos casos, una evaluación profesional por parte de un dentista. Sin embargo, existen algunas señales que nos puede indicar que el diente o muela tiene caries.
Las caries a menudo comienzan como manchas blancas o amarillas en los dientes. Estas manchas pueden ser difíciles de ver al principio, pero pueden volverse más evidentes con el tiempo.
Los niños con caries pueden experimentar sensibilidad dental cuando comen o beben alimentos fríos, calientes o dulces. Si tu hijo se queja de dolor o sensibilidad en los dientes, es una señal de que podría tener caries.
Si tu hijo tiene dificultades para masticar o evitar ciertos alimentos debido al dolor dental, esto puede ser un indicador de caries.
La presencia de caries puede causar un mal aliento persistente, incluso después de cepillarse los dientes.
Las caries avanzadas pueden afectar las encías circundantes, causando dolor o hinchazón en la boca del niño.
A medida que las caries avanzan, pueden causar la destrucción del esmalte dental y provocar cambios en la forma o el tamaño de los dientes afectados.
Si puedes ver cavidades o huecos en los dientes de tu hijo, esto es una indicación clara de caries dental.
Programa consultas regulares con un dentista para detectar caries en etapas tempranas. El dentista examinará los dientes de tu hijo y puede utilizar radiografías dentales para identificar caries ocultas que no son visibles a simple vista.
Es importante recordar que las caries pueden desarrollarse sin causar síntomas evidentes en las primeras etapas. Por lo tanto, incluso si no observas ninguno de los signos mencionados anteriormente, es esencial programar exámenes dentales regulares para tu hijo.
La prevención y el cuidado dental adecuados desempeñan un papel importante en la salud bucal de los niños, y el dentista puede proporcionar orientación sobre cómo mantener los dientes de tu hijo sanos.
Entre las causas más comunes se encuentran:
Consumo de azúcar
Las caries de esta causa se forman por la descomposición de azúcares y almidones que las bacterias descomponen produciendo ácidos corrosivos que erosionan el esmalte dental causando manchas que progresivamente se transforman en caries.
Higiene Bucal Inadecuada
Si no se cepillan y se limpian los dientes adecuadamente, las bacterias pueden acumularse. Cuando los ácidos desmineralizan el esmalte del diente este se debilita dejando una puerta abierta para que las bacterias ingresen causando problemas. Una vez que se alcanza la pulpa del diente es donde se produce el dolor y molestia constante.
Falta de Flúor
El flúor es importante para fortalecer el esmalte dental y prevenir la formación de caries. Si no se obtiene suficiente flúor, hay un mayor riesgo de caries.
Prevenir la caries en niños es fundamental para mantener su salud bucal a largo plazo. Aquí hay algunas pautas importantes para prevenir las caries en los niños:
Enseña a tu hijo a cepillarse los dientes al menos dos veces al día, preferiblemente después del desayuno y antes de acostarse. Usa una pasta dental con flúor y un cepillo de dientes de tamaño adecuado para su edad.
Los niños pequeños pueden no tener la destreza necesaria para cepillarse correctamente. Por lo tanto, es importante que los padres supervisen el cepillado y ayuden a los niños hasta que sean lo suficientemente mayores para hacerlo por sí mismos de manera efectiva, generalmente alrededor de los 6 años.
A partir del momento en que los dientes de leche comienzan a tocarse entre sí, generalmente alrededor de los 2-3 años, debes comenzar a usar hilo dental en su boca. Esto ayuda a eliminar la placa bacteriana y los restos de alimentos entre los dientes.
Limita la cantidad de alimentos y bebidas azucaradas en la dieta de tu hijo. Evita darles bebidas azucaradas entre comidas y trata de que los dulces sean ocasiones especiales en lugar de un hábito diario.
Evita poner a tu bebé en la cama con un biberón que contenga jugo o leche, ya que los azúcares de estos líquidos pueden quedar en los dientes y causar caries. Limita el uso prolongado del chupete, ya que puede afectar la alineación de los dientes.
Asegúrate de que tu hijo reciba suficiente fluoruro, ya sea a través del agua potable fluorada, suplementos de flúor (si el agua no está fluorada) o pasta dental con flúor. Consulta con un profesional de la salud dental para determinar la cantidad adecuada de fluoruro para tu hijo.
Tal como mencionamos anteriormente, el dentista puede detectar la formación temprana de una caries. Pero también nos puede enseñar pautas de la rutina de limpieza que el niño debe seguir para proteger sus dientes de las caries.
Pregunta al dentista acerca de la posibilidad de aplicar selladores dentales en los dientes de tu hijo. Estos recubrimientos ayudan a prevenir la acumulación de placa y la formación de caries en las superficies masticatorias de los molares.
Sé un buen modelo a seguir para tu hijo al mantener tus propios hábitos de cuidado dental. Si ven que te preocupas por tu salud bucal, es más probable que sigan tu ejemplo.
Enséñales a tus hijos la importancia del cuidado oral y los efectos negativos de las caries. La educación temprana puede ayudar a que comprendan por qué es esencial mantener sus dientes limpios y saludables.
La prevención de las caries en niños requiere una combinación de cuidado bucal en el hogar, una dieta equilibrada y visitas regulares al dentista. Al establecer hábitos saludables desde una edad temprana, puedes ayudar a asegurar la salud bucal de tu hijo a lo largo de su vida.