La higiene postural se refiere a la práctica de adoptar posturas y movimientos adecuados para mantener el cuerpo en una alineación óptima. De esta manera se reduce el estrés y la tensión en los músculos, articulaciones y estructuras del cuerpo.
Esto se aplica tanto en actividades cotidianas como estudio, descanso, actividad física y cualquier otra situación que involucre movimiento y posición del cuerpo.